Dentro de la actuación global del Complejo Ferial y Palacio de Congresos de Talavera de la Reina y como fusión entre la Arquitectura e Ingeniería, el puente se hace habitable a la par que se constituye en el gran pórtico de entrada a todo el recinto lúdico.

Se versiona así una faceta histórica de los puentes, el puente habitado rememorando actuaciones clásicas como el ponte de Rialto en Venecia o el ponte Vecchio sobre arcos en Florencia.

Lateralmente el puente está recubierto de una piel interior de vidrio y una exterior de chapa perforada (entre ambas, en el espacio intersticial, las diagonales y montantes de las cerchas); la chapa perforada tiene una doble finalidad: de día evita el soleamiento directo dentro de las oficinas que se albergan en el puente tamizando la luz en el interior y de noche irradia la luz hacia el exterior iluminando toda la estructura.

El edificio puente está formado por dos jácenas trianguladas separadas 8,80 metros, con una longitud total de 85 metros, dispuesto en tres vanos: un vano de anclaje de 10 metros, un vano principal de 70 metros y un voladizo final de 5 metros, las vigas tienen un canto de 5,00 m.

Transversalmente se disponen vigas metálicas sobre las que se apoya un forjado colaborante compuesto por una chapa grecada que sirve como encofrado perdido para una losa de hormigón conectada transversal y longitudinalmente.

Las vigas trianguladas para disminuir la flexión en el centro de vano y la deformación máxima se han anclado en el apoyo trasero del vano de anclaje, este anclaje se realiza con cables de pretensado que llegan hasta 50 cm. de la cota inferior del encepado, donde se dejan unos anclajes pasivos para el posterior tesado al colocar la bijácena.