El puente Real de Badajoz es nuestra primera obra de gran escala y nuestro primer puente atirantado consecuencia del Primer Premio del Concurso Internacional que convocó el Ayuntamiento de Badajoz abierto a todos los profesionales de la Unión Europea en 1990. El Concurso se presentaba secreto con lema. El lema elegido para nuestro proyecto fue «Al-Cántara». Desde nuestros principios nuestra admiración por el puente de Alcántara. Años después, en 2018 ganaríamos el Concurso para el proyecto del Nuevo Puente de Alcántara junto al puente romano.
Desde el principio tuvimos claro que había que proponer la gran imagen, el gran símbolo de la ciudad con el que todo el mundo se pudiera identificar.
Badajoz ha sido históricamente una ciudad militar de frontera parapetada tras sus concéntricas murallas romana, musulmana, medieval y dieciochesca Vauban. La mayor destrucción de su patrimonio no lo produjeron las sucesivas guerras sino el boom inmobiliario de finales del Siglo XX. La ciudad carecía de un icono potente que su alcazaba o su catedral no lograban aportar.
LA IMAGEN SÍMBOLO DE LA CIUDAD. El puente rebasa su función de mera infraestructura y se convierte en el icono de Badajoz en una operación de transformación del skyline análoga a la aparición de las torres de las catedrales góticas en el s. XIII.
LA ESCALA – EL COLOSO.
LA PUERTA – ARCO DE TRIUNFO.
EL LÍMITE.
FIGURA – FONDO.
ARPA DE TIRANTES.
LA BIPOLARIDAD EN LA CIUDAD.
LA IMAGEN NOCTURNA – LA IMAGEN DIURNA.
LA INTEGRACIÓN EN EL ENTORNO.
LO TECTÓNICO.
LA ESTRUCTURA.
Es un puente atirantado con un único plano de cables centrales con una longitud de 320 m y un solo pilono, con un vano principal de 168 m y uno secundario de 112 m y un vano de retenida de 40 m con 24 m de anchura de tablero. Pilono y tablero se resuelven en hormigón blanco con costillas de acero. El tablero es una sección cajón hueca de hormigón pretensado, del que parten las costillas transversales moduladas cada 4 m.
El atirantamiento es axial al eje del tablero y por tanto sólo activo frente a esfuerzos longitudinales de flexión y cortante, confiándose al tablero los esfuerzos de torsión. El tablero se ha resuelto con hormigón de alta resistencia de 500kp/cm2 pretensado en forma de sección cajón con costillas metálicas en voladizo. El pilono central es el elemento clave del diseño tanto formal como estructuralmente. La elección del pilono en A, una vez decidido el atirantamiento axial, evita los sobreanchos del tablero que generan los pilonos rectos ubicados en el eje de la mediana. Además su comportamiento ante solicitaciones transversales, tales como el viento, es muy eficaz. Las pilas de retenida asumen la misión de coartar el desplazamiento en cabeza del pilono. El puente funciona tanto mejor cuanto más limitado sea este desplazamiento. El vano de retenida tiene una dimensión de 40 m con una gran rigidez a flexión lo que le hace muy eficiente.
El puente fue construido mediante pilas provisionales para apoyo durante la ejecución del tablero, posteriormente al tesar los tirantes el puente se levantaba y las pilas provisionales se demolían.